Este debe ser el estilo del 2.008, o al menos el que yo propongo. Como dice este peliculón, cualquier ser humano, por más humilde que sea, puede cocinar. Sólo hay que quererlo. Y uno quiere querer y quiere que todos quieran, así que parto este año deseándote que perfecciones tu olfato y hagas platos maravillosos, porque, por si no lo sabías, la vida es una cocina.
No dejes de ser ocioso (a).
Mis más sórdidos deseos para todos, lucidez, fuerza y ganas, les desea su humilde rata Sanfeliú.
martes, 1 de enero de 2008
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